domingo, 13 de agosto de 2017

LA INSTITUCIÓN LIBRE DE ENSEÑANZA

La Institución Libre de Enseñanza o ILE fue un intento pedagógico que se realizó en España, inspirado en la filosofía de Karl Christian Friedrich Krause. Tuvo una repercusión excepcional en la vida intelectual de la nación.
Fue fundada en Madrid en 1876, por varios catedráticos y auxiliares de la Universidad, entre los que se encontraban Francisco Giner de los Ríos, Nicolás Salmerón, etc.).

La institución llevo a cabo una renovación cultural y pedagógica en los siglos XIX y XX, en España.

Giner de los Ríos y Bartolomé Cossío orientaron la Institución Libre de Enseñanza hacia la construcción de un hombre nuevo e íntegro, abierto a todos los ámbitos del saber, mediante una educación moderna, capaces de elevar el nivel sociocultural del país.

Desde 1876, hasta la guerra civil en 1936, la ILE se convirtió en el centro de gravedad de toda una época de la cultura española y un cauce para la introducción en España de las más avanzadas teorías pedagógicas y científicas que se estaban desarrollando.

La introducción de la ILE fue determinante para que los poderes públicos emprendieran una serie de reformas, que España necesitaba en los terrenos jurídico, educativo y social. Se crearon organismos, como el Museo Pedagógico Nacional y la Junta para Ampliación de Estudios, que se encargaba de enviar estudiantes becados a estudiar al extranjero.

Tras la muerte de Francisco Giner de los Ríos en 1915, se creó una fundación con su nombre en 1916, con el fin de velar por el patrimonio de la ILE y seguir con la tarea educativa que estaban llevando a cabo.

La dos fuerzas principales en la educación son; la personalidad del docente y el ambiente y contorno social de la escuela.

En la Institución se daban materias tradicionales, y otras como, antropología, tecnología, economía, arte, dibujo, canto y laborales. Las clases eran por la mañana y por la tarde, y tenían una duración de unos 45 minutos. Los alumnos tenían unos 15 minutos para descansar o jugar libremente en el jardín, entre las clases.
Se ayudaron a la creación de materiales didácticos que encajaban con el plan de estudio del centro, donde estaban muy presentes los idiomas, las clases de música, la biblioteca y los deportes. Además de las actividades, las excursiones, visitas a fábricas y museos, representaciones teatrales, etc.

El curso se dividía en tres trimestres, separadas por las vacaciones de Navidad, (del 22 de Diciembre al 6 de Enero), las de primavera y las de verano (julio, agosto y septiembre). Durante las vacaciones, cesaban las clases escolares, pero la Institución organizaba excursiones para dentro y fuera de Madrid.

La figura del docente es el punto de referencia de las transformación de la educación en los niños, es decir, el órgano vital. Los elementos que tenían en cuenta en e profesorado era la vocación, severidad, integridad en la conducta y las dotes de investigación y exposición. 
Asimismo, el niño en la Institución era considerado como individuo único, original e irrepetible, es decir, como objeto de máximo respeto.

La ILE admite que la pedagogía puede ser una ciencia de la psicología infantil, porque la psicología del niño es global, el niño tiene personalidad propia.

El paso del tiempo, permitió que se dieran a conocer los nombres de las mujeres que estaban implicadas en los proyectos de la ILE, como Gloria Giner de los Ríos, María Moliner, Laura García de los Ríos, Matild Huici, María Zambrano, entre muchas otras.

Las innovaciones sociales más importantes de la ILE fue su propuesta a favor de la integración de la mujer en la sociedad, en igualdad de acceso a la formación cultural y en la realización profesional. También se creó la Asociación para la Enseñanza de la Mujer, que fue un proyecto educativo creado en 1870 por Fernando Castro y Pajares.

En definitiva, hay que destacar la importancia de la Institución Libre de Enseñanza puesto que tenía como objetivo hacer una reforma educativa en España, basándose sus principios pedagógicos.

Uno de esos principios era educar a los alumnos sin presiones, ni amenazas en un mundo de respeto y solidaridad, para que pudieran aprender a desenvolverse con soltura en la sociedad.


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